Resumen de El lobo estepario

Sinopsis de El Lobo Estapario

De acuerdo a la mayoría de los críticos literarios, especialistas en la obra de Hesse, El lobo estepario constituye el primer abordaje autobiográfico que este autor emprende dentro de su escritura. Así, esta novela constituye un reflejo de la imposibilidad y abismo que el autor sentía hacia el mundo, manifestándose en la división que el personaje del libro vivencia entre la Humanidad y su sentimiento hermitaño, que lo hacía identificarse más con un lobo solitario de la estepa que con una persona.

Títulada originalmente en alemán como Der Steppenwolf, El lobo estepario constituye una novela característica de la literatura del siglo XX, en donde se abandonaba la narrativa descriptiva de la novela decimonónica, para dar paso a la novela psicológica, donde el viaje del personaje se da pero hacia dentro de sí. Igualmente, las descripciones se dan en torno a la atmósfera emocional de su protagonista, mientras el paisaje y contexto geográfico pasa a segundo plano, y en última instancia sirve para ser reflejo directo del estado psíquico de sus personajes, quienes además dejan también de ser meros personajes literarios, para perfilarse más como personas, agregándoles una dimensión más: la dimensión psicológica.

Así, El lobo estepario se ha convertido por generaciones en el libro de cabecera de los lectores adolescentes, quienes ven es sus líneas luces de cómo saldar la brecha que los hace sentir fuera del mundo, mostrándoles una nueva forma de enfrentarse con la muerte, la sociedad y los sentimientos propios de la condición humana. No obstante, su autor –pese al fenómeno literario que significó la obra- mantuvo siempre que los lectores habían interpretado de forma errónea, dándole a las imágenes y situaciones un sentido distintos a su intensión original.

Resumen de El lobo estepario

Esta obra de Herman Hesse ubica a su protagonista, un solitario hombre de nombre Harry Haller –cuyas iniciales los críticos señalan que corresponden a las de Herman Hesse- en la ciudad de Basilea, en donde vive solo, entregado a la música, la lectura, el tabaco y el vicio. Desde el principio, el narrador de esta historia hace énfasis en el disfrute secreto que tiene este personaje sobre su soledad, pues es descrito como un ser híbrido, el cual cuenta con una naturaleza humana y otra más correspondiente a un lobo, como si se tratara de un licántropo.

Así mismo, la novela evoluciona hacia el encuentro del huraño Heller con un profesor, quien tuvo la oportunidad de conocerlo en su juventud. En pro de los buenos tiempos y quizás también por cortesía, el maestro invita a Haller a cenar en compañía de él y su esposa. También por respeto, Heller termina aceptando, pero no de muy buena gana, pues siente que para ese momento no sabe cómo relacionarse con otros individuos, y mucho menos cómo  mantener una conversación con otra persona. La preocupación surgida tras la propuesta lo hace vagar por la ciudad, hasta que llega a un bar, donde no tiene otra opción que conocer a Armanda, una muchacha que desde el primer momento muestra interés por Hellar.

Usando una certera estrategia femenina, Armanda logra convencer a Hellar de salir de su aislamiento, a fin de que se integre en un mundo un poco más alegre. Ante esta invitación y esfuerzo, Haller comienza a sentir cierto sentimiento de cariño hacia Armanda. Hacia el final de la obra, Haller llega a un teatro, donde encuentra a un saxofonita, llamado Pablo, y a Armanda en un acto carnal en el suelo. Descolocado por la ira, Haller entierra un cuchillo en el pecho de Armanda, lo cual conduce a su arresto y condena.

Después de lo que parece un momento de locura, Hallar despierta y regresa a la realidad, para mostrarle que todo ha sido una alucinación que lo hizo imaginar cosa, haciéndolo acabar con lo único preciado que poseía: la vida. Para algunos críticos literarios, este final-desenlace, constituye a su vez el clímax de la novela, pues su autor consigue guardar para la última parte el momento en el que este hombre de naturaleza licantrópica abandona los terrenos de la comedia dionisiaca, en donde el mortal sufre bajo la risa complaciente de los dioses, para tornar la historia en un drama moderno, que no llega a ser tragedia porque carece del sentido familiar. De esta forma, el héroe de esta historia se sumerge en su propia destrucción, como si entre el hombre y el lobo, hubiese ganado este último.

Por otro lado, algunos críticos dan otra interpretación, un poco más a favor del hombre que encuentra la sociedad superflua, refugiándose en sus placeres y conocimientos, en aras de desprenderse totalmente de ese vínculo gregario, decisión que más de una vez puede ser interpretada como rasgo de locura. Sin embargo, en su viaje hacia la individualidad absoluta, aparece la figura de Armanda, quien lo hace fracasar en su intento, y por el contrario lo hace perder todo tipo de Libertad.

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